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Valentino Rossi anuncia su retirada de MotoGP

Por un escritor de hombre misterioso

El piloto italiano Valentino Rossi pondrá punto final a su carrera después de 26 temporadas en el Mundial.
El italiano Valentino Rossi ha anunciado que se retira del Campeonato del Mundo de MotoGP al final de la temporada 2021. Lo ha hecho en una rueda de prensa extraordinaria en el marco del Gran Premio de Estiria en el Red Bull Ring, exactamente 25 años y un día después de su primer podio mundialista logrado en el mismo escenario, entonces llamado A1 Ring. La historia de Valentino Rossi es la más grande jamás contada en el motociclismo de velocidad. Nueve títulos mundiales (siete de ellos en categoría reina), 115 victorias, 235 podios, 65 poles y 96 vueltas rápidas a lo largo de 423 carreras, que a priori serán 433 cuando cuelgue el casco al terminar la carrera del Gran Premio de la Comunidad Valenciana en el Ricardo Tormo. MotoGP en DAZN en vivo y a la carta. Suscríbete y comienza tu mes gratis. IRRUPCIÓN Y RUMBO A CLASE REINA 1995-1999 Tras haber sido tercero en el Campeonato de Europa de 125cc en 1995, ganado por su veterano compatriota Lucio Cecchinello, Valentino Rossi tenía 17 años recién cumplidos cuando hizo su debut mundialista con la Aprilia RS125 de la Scuderia AGV en la cita inaugural de 1996 en Shah Alam, donde ya consiguió una interesante sexta posición. En su cuarta carrera en Jerez ya rozó el podio, que llegaría en su décima carrera en Austria, preludio de lo que sucedería dos semanas después en Brno: pole y victoria tras un mano a mano ante una leyenda como Jorge Martínez 'Aspar'. Fue su segundo y último podio de la temporada, que terminaría en novena posición. Valentino Rossi en 1996 En 1997, ya con los colores del Nastro Azzurro, comenzó en Malasia con victoria, pole y vuelta rápida, aviso de lo que estaba por venir: campeón del mundo con once triunfos, récord absoluto en la historia del octavo de litro. Éxitos en pista que, combinados con un carisma adolescente fuera de lo normal, le iban convirtiendo en una súper estrella. Saltó a 250cc con Nastro Azzurro y Aprilia, y en tres carreras estaba en el podio. La victoria tardó siete carreras en llegar, en la cita de Assen, y acabó el año como un misil venciendo en los cuatro últimos grandes premios de forma consecutiva para ser subcampeón al tiempo que testigo de excepción en la polémica resolución del título entre Loris Capirossi y Tetsuya Harada. Al segundo año repitió el guion de la categoría ligera y se hizo con el título de forma apabullante ante Tohru Ukawa, convirtiéndose en bicampeón mundial con apenas 20 años. Para entonces ya era el piloto de moda en el motociclismo, con todas las miradas puestas en su desembarco en 500cc, especialmente después del vacío de poder dejado por la retirada de Mick Doohan. REY ABSOLUTO DE 500CC Y MOTOGP 2000-2003 No fue fácil su estreno en 500cc, que se produjo con una Honda NSR500 pero de nuevo en la estructura del Nastro Azzurro: no terminó las dos primeras carreras y fue undécimo en la siguiente. A la cuarta llegó el podio en Jerez, si bien el escalón más alto se le resistió hasta la novena cita en Donington. A partir de ahí prácticamente no se bajó del cajón y terminó como subcampeón del mundo, solo por detrás de Kenny Roberts Jr. Una vez más, a la segunda fue la vencida. Arrancó el año con tres triunfos consecutivos y lo terminó con la friolera de once para proclamarse campeón del mundo con gran ventaja sobre su entonces archirrival Max Biaggi, igualando además a Phil Read como únicos pilotos en haber conquistado 500cc, 250cc y 125cc. Valentino Rossi en 2001 2002 trajo dos cambios: el Mundial dijo adiós a 500cc y dio la bienvenida a la nueva categoría de MotoGP, y en el caso de Rossi, el adiós a Nastro Azzurro para vestir la flamante RC211V de cuatro tiempos y 990cc con los colores del Repsol Honda. Un periplo que duró dos años y en el que no hubo más color que el 46 amarillo. 20 victorias y 31 podios en 32 carreras le convirtieron en rey absoluto del motociclismo mundial. El binomio formado con la Honda era tan temible que amenazaban con dominar MotoGP durante muchísimos años… pero sucedió lo inesperado. AL FILO DE LO IMPOSIBLE 2004-2005 Harto de escuchar que ganaba por la moto, sacudió los cimientos de MotoGP al irse a Yamaha. Un salto al vacío sobre la YZR-M1 que venía de un año más que discreto con un solo podio. La misión parecía casi imposible: retener su puesto en el trono con una moto que se había mostrado bastante inferior. Lo sucedido entonces es una de las páginas más brillantes en la historia del motociclismo en general y de Rossi en particular. La temporada 2004 comenzaba en el circuito sudafricano de Welkom, donde el italiano consiguió la pole y cruzó la línea de meta con dos décimas sobre Biaggi, que se había quedado como la gran esperanza de la marca del ala dorada. Valentino Rossi debutó con Yamaha batiendo a Max Biaggi en Sudáfrica 2004 Sin replicar la abrumadora tiranía de los dos cursos anteriores en Honda, firmó un 2004 muy sólido para imponerse en la general a Sete Gibernau y meterse en el club de los campeones de clase reina con dos marcas, algo que hasta entonces solamente habían hecho Geoff Duke, Giacomo Agostini y Eddie Lawson, con Casey Stoner uniéndose siete años más tarde. Un año más tarde fue más allá: lo revalidó con autoridad para convertirse en el único piloto de todos los tiempos en ganar más de un título con dos marcas diferentes. Una vez hecho lo imposible, tocaba extender el reinado. DERROTA Y RECONQUISTA 2006-2009 Como suele suceder en la vida, cuando todo parece ir sobre ruedas aparecen las dificultades. En el caso de Rossi fue en 2006, cuando demasiados errores le condenaron a jugárselo todo a una carta en Valencia, donde llegó con ventaja sobre Nicky Hayden. Allí sufrió su derrota más sonada: se fue al suelo y el añorado estadounidense dejó en cinco su racha de títulos seguidos. Y si esa temporada se puede considerar que lo perdió por sus propios errores, la temporada 2007 fue la primera en la que se vio claramente superado. El trinomio formado por Casey Stoner, Ducati y los Bridgestone arrasó sin piedad y Rossi terminó incluso perdiendo el subcampeonato ante Dani Pedrosa. Valentino Rossi en 2008 Convencido de estar en desventaja por los neumáticos, Rossi pidió montar Bridgestone en su Yamaha, mientras las demás llevaban Michelin. El caso es que funcionó: Stoner no pudo mantener el nivel del curso anterior y, tras un inicio de temporada dubitativo en el que parecía que nadie quería coger ventaja, Rossi aceleró ganando tres carreras seguidas y lo remató en la segunda mitad de año con una racha de cinco para convertirse en octacampeón mundial y hexacampeón de la clase reina. Si recuperar el cetro fue complicado, mantenerlo todavía más. Hasta entonces, siempre que había sido campeón, había ganado al menos nueve carreras. En 2009 no pudo mostrar esa superioridad, pero lo compensó con su experiencia para, con seis triunfos, batir en el mano a mano a su compañero Jorge Lorenzo e igualar los nueve títulos mundiales de Mike Hailwood y Carlo Ubbiali. LESIÓN Y PESADILLA 2010-2012 La incansable búsqueda del décimo arrancó en 2010, con el aliciente añadido de poder igualar los ocho títulos en categoría reina de Giacomo Agostini. Por aquel entonces resultaba impensable que su cuenta de títulos se fuese a detener ahí, pero entonces llegó el gran enemigo de los deportistas: la lesión. Por primera vez desde Malasia 1996, se quedó sin disputar un GP. Para colmo, fue en Mugello. Tras cuatro carreras sin participar regresó, y poco después anunció que a final de temporada se iría a Ducati para intentar el más difícil todavía: ser campeón con tres marcas distintas. Mientras Lorenzo se coronaba al otro lado del box, pudo al menos lograr un último triunfo con su M1 en Malasia. Valentino Rossi en Ducati El sueño italiano de Rossi y Ducati se tornó rápidamente en pesadilla. A diferencia de lo ocurrido siete años en el cambio a Yamaha, esta vez no pudieron transformar en una moto ganadora a la Desmosedici, que llevaba años en declive. Condenado a luchar por cuartos, quintos y sextos puestos, consiguió rascar tres podios en dos temporadas para olvidar, que además acabaron con el peor momento de su vida deportiva cuando su amigo Marco Simoncelli falleció en Sepang a finales de 2012. En busca de la felicidad perdida volvió a Yamaha. SEGUNDA JUVENTUD Y DECLIVE 2013-2021 Allí se encontró con un Lorenzo convertido en líder de Yamaha, con un Pedrosa muy fuerte y con la llegada a MotoGP de Marc Márquez, que había ido siguiendo sus pasos conquistando las categorías ligera e intermedia. Aunque fue segundo en su reencuentro con la Yamaha en Qatar y se impuso en la séptima carrera en Assen para terminar una larguísima sequía, tuvo que reaprender a ser tan rápido como sus tres rivales. En 2014 volvió a hacerse asiduo al podio y ganó dos carreras para ser subcampeón, pero muy lejos de Márquez. Cuando parecía que sus últimos trenes al décimo se habían escapado, llegó 2015. Una temporada frenética, donde Honda falló y todo quedó servido para un Rossi vs Lorenzo que se resolvió de forma agónica en Valencia en favor del balear, con 'Il Dottore' logrando cuatro victorias y quedándose a tan solo cinco puntos de redondear su palmarés. Valentino Rossi en Assen 2017 Aunque en la temporada siguiente firmaría su tercer subcampeonato consecutivo, lo hizo lejos de un renovado Márquez. Añadió dos triunfos a su cuenta y siguió pisando el podio con asiduidad, algo que cada vez sucedería menos. En 2017 llegaría su último triunfo, logrando en la Catedral de Assen, y desde que acabara tercero en la general de 2018 gracias a su gran regularidad, todo ha ido yendo cuesta abajo. Séptimo con dos podios en 2019 y 15º en 2020 con una sola presencia en el cajón (perdiéndose además dos carreras por ser positivo en Covid-19), en este 2021 no solo no se ha asomado al podio, sino que hasta el momento su mejor resultado ha sido un décimo puesto. Un bajón más que normal a sus 42 años que le ha llevado a tomar la decisión de la retirada, pese a la tentadora oferta del príncipe saudí para despedirse corriendo con una Ducati en su propio equipo. Por lo tanto, el 14 de noviembre de 2021 caerá el telón en el 26º y último acto de una obra irrepetible: la de Valentino Rossi en el Campeonato del Mundo de Motociclismo. Cuando llegue el día, solamente quedará ponerse en pie y dedicarle una ovación atronadora a la altura de su leyenda.